Situación: el hotel conservaba la misma imagen corporativa que se ideó en el año de su apertura, de forma que necesitaba una renovación. La imagen no se correspondía con la identidad del hotel, la calidad del servicio y las instalaciones, no reflejaba el sentimiento de ocio y relax que los clientes buscan durante sus vacaciones. Tampoco trasladaba las características que hacen de Peñíscola un destino turístico único. Así que la gerencia aprovechó obras de reforma en las instalaciones para relanzar su marca.
Nuestra estrategia: mediante el estudio de la competencia y el entorno en el que opera, así como del público objetivo del hotel, se procedió al diseño de un logotipo que reflejara los principales atractivos del hotel: las vistas al mar y la playa y el castillo de Peñíscola, ofreciendo una imagen más actual y atractiva.
Se adaptó el diseño de la nueva imagen corporativa a todas sus aplicaciones: papelería, toallas, rótulos, firma digital, etc.